Los
asientos pélvicos son una herramienta terapéutica complementaria,
que utilizamos los fisioterapeutas en las aulas, con la finalidad de
conseguir una sedestación estable y funcional.
Están
confeccionados con bandas de yeso usando el cuerpo del niño como
molde. Se alisan y, posteriormente, se pintan.
Se
utilizan para obtener una simetría pélvica en la carga en
sedestación, una adecuada orientación de la pelvis y una
estabilidad postural en la realización de las diferentes actividades
en el aula.
Están
indicados en niños que adoptan posturas anormales compensatorias,
pero que tienen la posibilidad de aprender nuevos ajustes posturales
en sedestación. Con ello, limitamos la progresión de deformidades
músculo-esqueléticas (actitud cifótica, escoliosis…), mejoramos
su control postural y los entrenamos en los nuevos ajustes
posturales.
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